Saludos. Los británicos también se están subiendo al carro del retorno a la munición 7,62 mm, para armamento ligero y sobre todo polivalente. Un ejemplo es la adquisición de un nuevo modelo de fusil, que aunque ya se encontraba en servicio en otros Ejércitos (bajo nomenclatura SR-25), parece que va tomando gran representación en los teatros de operaciones.
El Rifle L129A1 Sharpshooter es un arma semiautomática calibre 7,62 mm permite realizar disparos a distancias mayores que con los fusiles habituales con los que el combatiente, en misiones de patrulla o asalto, contaba dentro del Ejército Británico. El L129A1 permite patrullar y combatir como si se tratase de un fusil de asalto convencional, pero con la ventaja de poder efectúar blancos en un rango de hasta los 800 metros.
El peso total del L129A1 , incluyendo bipode, ACOG x1.5/x6 vista y un cargador vacío 20 de 20 cartuchos es 6.93kg.
La longitud del L129A1 Sharpshooter es de 90.5cm con la culata extensible en la posición cerrada o plegada.
Permite por su constitución, que sea usado en rangos inferiores de distancia, como si se tratase de un fusil de asalto. Sin dejar de ser un arma para francotiradores o tiradores selectos, por su tamaño permite un uso polivalente en el combate.
Se suma al retorno de un calibre contundente, que tras las lecciones aprendidas de los Ejércitos que operan en Irak y Afganistán ante circunstancias particulares del combate, se hace más que preciso, para eliminar las amenazas que con otros calibres, pueden provocar daños antes de ser abatidos de una forma definitiva con calibres menores, que precisan una mayor exposición del tirador y cantidad de munición.
Un abrazo
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Se parco en palabras, que tus hechos hablen por ti
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